Crónicas de un pueblo (III) - Otro museo más para la villa - ojalá...

      Durante más de cincuenta años estuvieron volando sin descanso en multitud de misiones y, hace hoy ya un mes, la última pareja recogió las hélices para siempre.  Los últimos Sikorsky SH-3D de la Armada fueron dados de baja y se desconoce el destino que les espera. 

      Bien pudiera la villa  que durante tanto tiempo los vio recorriendo sus cielos adoptarlos y darles otro importante uso. A ellos, y a tantas otras aeronaves que pronto sellarán su destino a  tierra.  Adoptarlos por su vinculación a la población, tantas veces surcando su cielo y sus aguas. Y a su Base Naval, que es de las de durante más años ha acogido a aeronaves  de la Armada - más que Barcelona, más que San Javier.       

El momento del relevo ha llegado, ahora toca descansar en tierra

      Deberían estar expuestas en una exposición permanente - alguna temporal de vez en cuando también -  y rodeadas por  maquetas de otras aeronaves de la que ya no quedan vestigios, dioramas, fotos históricas, aeronaves fuera de servicio, armas, equipos y herramientas/utensilios, documentos, cuadros, audiovisuales, una biblioteca,... Aunque la guinda siempre sería el grupo esas aparatos fuera de servicio que tanto han contribuido a la defensa de nuestro país y sus intereses.

      Hablemos de beneficios: no sólo desde el punto de vista cultural tendríamos un punto de referencia a nivel nacional, fruto de un legado excepcional; también desde el punto de vista turístico sería un otro atractivo más a tener en cuenta, especialmente durante esos meses donde las masas ya no frecuentan las playas gaditanas.

      Y por favor, no nos vengan con historias: cuando hay voluntad de hacer algo, se sacan los recursos de donde sea. Si se buscan espacios para hacer macro-fiestas, - entornos naturales inclusive - ¿por qué no se puede buscar un espacio en el que albergar todo este tesoro? 

      Así pues, y sin que nadie nos lleve la contraria, el Museo Del Arma Aérea de la Flota... en la Real Villa de Rota. ¿Dónde si no?

Y a otros también les llegará