Los ecos de los romeros encaminándose al pinar aún no han llegado a la playa: suponemos que los preparativos para emprender la marcha estarán ultimados y la expectación de las decenas de participantes deseosos de llegar a su destino seguirá en aumento. Mientras, percibimos cómo las últimas mareas han avanzado en el descarnado de la duna, dejando al descubierto restos de alguna antigua construcción, que habrá estado oculta por décadas.
Algunos ladrillos están dispuesto en horizontal cual si fueran fichas de dominó que, al caer, forman figuras de simetría mágica. Las arenas y las plantas los cubrieron, las aguas los destaparon. Pequeñeces que acontecen a lo largo del tiempo.
Nota: Fotos tomadas con Xiaomi Redmi Note 9, editada con Microsoft Fotos y Windows Paint.
Parece una pequeña muralla. A lo mejor algún día nos enteramos cual era el fin de esos ladrillos.
ResponderEliminarA lo mejor ya lo han mencionado en algún periódico o similar.
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