Nuevos tiempos, nueva imagen

 

      Durante el almuerzo, escuchamos una noticia del noticiario provincial sobre cierto chiringuito ecológico-sostenible en la provincia, construido con maderas portadoras de certificado de sostenibilidad, módulos fotovoltaicos para producción de energía eléctrica, y paneles solares para agua caliente sanitaria. Un chiringuito de su tiempo y, encima, resultó ser villano. 

Viéndolo por primera vez desde detrás de la duna, parecía una cosa....

      Y como ya se habló aquí con anterioridad del establecimiento que lo precedió, no cabe imaginarse la satisfacción de la legión de pijo-progres - siempre amantes de la novedad, de las nuevas experiencias y de lo auténtico - por el nuevo centro de reunión. El look - ¿o más bien el impacto visual? - de semejante estructura parece que o es del agrado de la tribu, o no debe de importarles mucho.

...pero viéndolo desde el otro lado, vaya tela del telar.

      Seguro que la caja está funcionando a buen ritmo este verano, y lo hará el resto del año. Y ojalá el negocio les vaya viento en popa, tal y como está la economía en general. Aunque un servidor sigue añorando la estética, el encanto del anterior. Aunque no vayamos a ser extremistas: habrá que pasarse a probar los tostones de plátano con una copita de un buen blanco al atardecer.

La próxima vez, que el móvil no impida disfrutar del atardecer al pie de la playa