Este taraje da sombra, tan cerca del mar, en un parque.
Sombra... ese fruto tan deseado en los veranos meridionales.
Y esas ramillas brotando tan cerca del suelo... no tiene sentido... ¡la copa del taraje está bastante más arriba!
¡Qué árbol! A pesar del muñón, aún tiene fuerzas para crecer alrededor de aquél. ¿Por qué tanta obstinación?
.
Es esa obstinación por crecer la que le hace seguir con vida. Esas ramillas son sin duda el grito hacia la inmortalidad.
ResponderEliminarLos obstáculos que nos encontramos nos hacen salir de nuestra zona de confort. Nosotros dudamos, el árbol no. ¡Gracias!
ResponderEliminar